Ocho empresas exportadoras de biodiésel paralizaron sus plantas
Las plantas exportadoras de biodiésel están paralizadas. Por la normativa vigente, no proveen al mercado interno, que es abastecido por las pymes regionales, y hoy enfrentan problemas para vender al exterior. Ayer, las mpresas a Energía que revea la situación para volver a tener actividad. Son ocho en total, con una capacidad de producción de 4,5 millones de toneladas anuales.
Al cierre del mercado de Estados Unidos por cinco años (en abril fijó un arancel del 72%) se sumó que los importadores de la Unión Europea paralizaron las compras ante la posible aplicación de un arancel antisubsidio contra el producto argentino.
Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) -las exportadoras de biodiésel tienen molienda- dijo a LA NACION que ayer hubo una reunión con las autoridades de Energía para plantear que mantenga el corte obligatorio de 10% a las petroleras, que es abastecido por pymes regionales, pero que lo amplíe al 20% para que las exportadoras puedan competir entre sí a precio de mercado.
«Con más oferta se puede lograr una baja sustancial de precios que impactará en los combustibles», describió. En esta línea, Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), señaló: «Hoy podríamos vender biodiésel a precios en torno de 20 pesos por litro en el mercado doméstico, bien por debajo del valor del gasoil importado, y queremos hacerlo en competencia. Los usuarios podrían beneficiarse utilizando un producto ecológico en un corte mayor al 10% que se mezcla por ley el gasoil en la Argentina», dijo.
El lunes pasado, el Gobierno oficializó el incremento del 17% en el precio del biodiésel, que se utiliza para cortar el gasoil. Según la resolución 3/2018 de la Secretaría de Energía, el precio de la tonelada de biodiésel pasó de $22.589 a $26.509. Ese mercado lo abastecen las pymes regionales.
Antes del alza, en el sector alertaron que vivían una situación «muy compleja y que la industria está al borde de la destrucción» . Además, alertaron sobre la posibilidad de que se grave el consumo de biocombustibles que excede el corte legal (10% de biodiésel y 12% de bioetanol).
Idígoras enfatizó que la industria exportadora tiene una capacidad de producción cuatro veces mayor que el consumo nacional (4,5 millones toneladas versus un millón). «Los precios que las grandes plantas tienen están por debajo del que fijó Energía y compitiendo en el mercado impactaría», dijo.
El ejecutivo indicó que las autoridades analizarán los mecanismos legales para tratar de encontrar una solución. Las exportadoras de biodiésel paralizadas son ocho: T6 (AGD y Bunge); Renova (Oleaginosa Moreno, Glencore y Vicentín); Dreyfuss y Cargill. Son instalaciones altamente automatizadas, con unos 50 empleados promedio cada una.
FUENTE: La Nación